La región del Maule es conocida por sus importantes cultivos vitivinícolas y agrícolas ademas tiene un clima mediterráneo . Como destino turístico, esta región parece haber sido pasada por alto frente a otros destinos populares como Torres del Paine o San Pedro de Atacama. Pero lo cierto es que la Región de Maule merece un reconocimiento por sus soberbios paisajes y rica biodiversidad. Te aseguramos que la belleza natural de esta parte de Chile te va a sorprender y su ubicación, en pleno corazón de la Zona Central, hace que sea una destinación accesible para el viajero y el santiaguino. A continuación destacamos las mejores actividades al aire libre en la impresionante Séptima Región de Chile.
1. Senderismo en el Parque Nacional Radal Siete Tazas
Ubicada a 78 kms al sureste de Curicó, este parque nacional es un lugar único para explorar y disfrutar de la naturaleza. Sus densos bosques son el hogar de destacadas especies de mamíferos y aves como el pudú y el cóndor, en un entorno en que las aguas cristalinas del río Claro fluyen en cascadas espectaculares. Para ver las caídas famosas del parque, recomendamos los senderos Siete Tazas y La Leona. Y si no puedes resistir las aguas tentadoras de este paraíso forestal, el segundo ofrece la opción de bañarse en una piscina natural. Otra elección muy buena entre las diversas opciones de senderos es el circuito hacia El Bolsón, una ruta que lleva a los más aventureros a un sector cordillerano con paisajes hermosos para deleitarse.
2. Surf en Pelluhue
En Pulluhue se encuentra la capital de surf de la Región del Maule. Acá se celeran diversos campeonatos dónde sólo los mejores surfistas son capaces de montar “La Gotera”, una aterradora ola conocida popularmente como “la rompehuesos”. Si tu nivel no alcanza para enfrentarte a grandes oleajes puedes encontrar lugares más tranquilos para perfeccionar tu técnica.
3. Ruta del vino, Valle del Maule
El Valle del Maule es célebre por su producción de vino de alta calidad y por ser una importante área de exportación de caldos de Chile. Acá abundan los vinos premiados y diversas bodegas han aprovechado esta notoriedad para promocionar el enoturismo. En definitiva, este es el lugar perfecto para profundizar en el proceso de elaboración de los mejores vinos de Chile. Entre toda la oferta de bodegas recomendamos dos que merecen una visita por cultivar vinos exquisitos: Viña Balduzzi y Viña Gillmore, ambas con una gama de actividades para el visitante. Cabe destacar que cada enero se celebra La Noche del Carménère, la gala de las viñas de la Ruta del Vino, con comida excelente y música en vivo.
4. Trekkings en la Reserva Nacional Altos del Lircay
Esta reserva destaca por sus especies de flora y fauna protegidas, con la oportunidad de avistar pudús, pumas, o loicas, y ver el roble maulino entre otros. Para disfrutar de la naturaleza se pueden hacer cabalgatas, ir de picnic con vistas inolvidables, o aprovechar los senderos de trekking. Recomendamos la ruta hacia el Enladrillado, una formación rocosa misteriosa (se rumorea que es una pista de aterrizaje de ovnis) con una vista panorámica de los maravillosos paisajes y volcanes cercanos. Para alcanzar la cima del Enladrillado se necesita una dura jornada entera de caminata o, si prefieres tomártelo con más calma, puedes acampar a las orillas de la Laguna del Alto y proseguir al día siguiente.
5. Pesca en Iloca
En el pueblo costero de Iloca se encuentra la zona de La Pesca, justo a la desembocadura del río Mataquito. Desde la gigante roca llamada El Peñón de San Pedro, puedes disfrutar de unas impresionantes vistas panorámicas del río y las playas donde los pescadores se reúnen en la orilla y compiten amistosamente para obtener la mejor captura. Todos los visitantes coinciden en que es un lugar realmente bueno para respirar el aire oceánico y relajarse, sin importar si pescas o no.
6. Recorrer la Ruta del Roble en mountain bike
Hay tantos lugares bonitos para explorar en la región del Maule que basta recoger la bici y emprender el viaje. Un recorrido que ha ido atrayendo los ciclistas en busca de aventuras es la Ruta del Roble, llamada así debido a la gran población de robles maulinos (también conocido como hualo) que es característica de la región. Pedalear en este entorno de frondosa vegetación y agua azul brillante del lago Colbún es estimulante y otro punto a favor de esta ruta es que hay senderos aptos para todos niveles de experiencia.