“Homenaje al espíritu de los fundadores de la Universidad de Concepción” de Samuel Román. Escultura de bronce de siete metros de altura y trece toneladas. Es de 1965 y fue inaugurada oficialmente en la U. de Concepción el 7 de enero de 1966. Está ubicada en el foro de la Ciudad Universitaria y es un homenaje a los fundadores de esta casa de estudios, cuya meta fue crear la primera universidad laica del país, libre de discriminaciones por credos religiosos e ideologías políticas.
“Conjunto escultórico” de Federico Assler. Escultura levantada con motivo de la UNCTAD III (Conferencia Mundial de Comercio y Desarrollo de las Naciones Unidas) en 1972, en parte del terreno que hoy alberga al GAM. Estuvo escondida del ojo del público durante cuarenta años, hasta el 29 de octubre de 2013.
“Ícaro y dédalo (unidos por la gloria y por la muerte)” de Rebeca Matte. Escultura en bronce que pertenece a la colección del Museo Nacional de Bellas Artes. Es un monumento a la aviación. Su autora fue la primera mujer escultora en Chile y la primera extranjera, y mujer, nombrada profesora en la Academia de Bellas Artes de Florencia.
“Cielo de truenos” de Sergio Castillo. Escultura de fierro soldado y pintado sobre base de hormigón. Es de 1994, mide 16 x 6,5 x 4 metros y está en el nudo vial El Trébol, en la comuna de Talcahuano. De hecho, es un reconocimiento al nombre de Talcahuano, Tralkanwenu, antiguo lonco mapuche, que en mapudungun significa “Cielo tronador”.
“Blindaje para un organismo” de Juan Egenau. Escultura de aluminio, de 85 x 45 centímetros. Es parte de la colección del Museo de Bellas Artes de Valparaíso y es de 1977.
“El beso” de Mario Irarrázaval. Escultura de bronce, está en El Bosque con Ebro, comuna de Las Condes, desde 2004. Es el mismo artista que se ha hecho famoso con las manos de cemento de tamaño monumental en el desierto chileno, Punta del Este, Venecia y Madrid.
“Fuente escultórica en granito y agua” de Francisco Gazitúa. En el año 1999 se remodeló la Plaza Pedro de Valdivia, esa que está en la esquina con Bilbao, y las esculturas de Gazitúa se transformaron el punto más alto de este trabajo liderado por la oficina de arquitectos Iglesis Prat.
“Pachamama” de Marta Colvin. La escultura es de piedra roja de la cantera de Polpaico, mide 4.18 x 1.26 x 1.04 metros. Es la obra que inauguró el Parque de las Esculturas el 17 de diciembre de 1986. La escultura representa a una mujer, la Madre Tierra (“Pachamama” en lengua quechua), que en su vientre sostiene a la Cordillera de los Andes.
“La tierra” de Tótila Albert. Escultura en bronce. Está en la entrada del Centro Cultural Palacio La Moneda. Es del 2007 y es una reproducción de la obra original, hecha en yeso, que está en el MAC.
“Caupolicán” de Nicanor Plaza. Escultura de tamaño natural en bronce de 1869. Está en el Cerro Santa Lucía desde 1910. Y ha sido motivo de polémicas, pues la obra es bastante más representativa de un indio norteamericano que de un guerrero mapuche. Lo que no se discute es que Nicanor Plaza es considerado el primer escultor chileno.