Todos conocemos la expresión “tierra trágame” ¿verdad?, los habitantes de el país del que hablaremos hoy dirían algo similar (permitidme la “broma”): “agua trágame”, y en su caso sería una expresión de forma literal, puesto que el hecho de que suba el nivel del mar está provocando su desaparición. Kiribati peligra.
Los aproximadamente cien mil habitantes de este archipiélago formado por 33 atolones coralinos y una isla volcánica, están a la búsqueda y “captura” de una nueva patria que les acoja, pues parece que la idea de que el mar les despoje de sus tierras es irreversible. La mayoría las islitas de Kiribati no supera los dos metros sobre el mar.
Y si este hecho se cumple, se perderá un precioso rincón que pocos conocen. Extraviado al oeste del Pacífico, este archipiélago precisa ser visitado con las típicas canoas del lugar, construidas con gruesas cañas de bambú en los lados y un tablón de madera muy resistente atado en el centro. Muchos habitantes de Kiribati las emplean en sus “desplazamientos”.
Los micropueblecitos que encontrarás en Kiribati son a base de casitas con techos de paja. La vida transcurre sin trastornos y con mucha paz allí, con las preocupaciones de la pesca para nutrirse y poco más.
Aunque no es de la pesca de lo único que comen, pues también encontraremos numerosas palmeras con cocos con los que comercian también. Además en Kiribati se importa arroz y existen unas lombrices de arena que también son parte de la dieta del archipiélago.
Mientras realizan sus danzas, representan y narran cuentos a la par que muestran su maestría como bailarines. Kiribati es una zona en la que podrás realizar diversos deportes de aventura, básicamente aquellos relacionados con el mar como el snorkel, buceo o el surf.
Este archipiélago es una especie de Jardín del Edén, esperemos que su desaparición se retrase el máximo tiempo posible. Si te dispones a viajar a Australia, este es un territorio al que te aconsejo que te acerques, un remanso de paz rodeado de un entorno precioso te espera en Kiribati. Se lo contarás a tus nietos.