En Louisiana las aguas no paran de dar malas noticias, en 2005 el Katrina inundó la ciudad de Nueva Orleans y estuvieron 3 meses para bombear el agua hacia el mar. Ahora la amenaza de la mancha de petróleo avanza hacia el delta sin poder detenerla.
La ciudad más famosa del Missisipi fue noticia de nuevo, hace pocos meses, por un hallazgo que se repite desde 1987. Un pescador encontró dos crías de caimanes blancos en un pantano de la zona en Louisiana. En su zoológico ya cuidan de esta especie única desde que encontraron a los primeros.
Este zoo ya tenía 10 caimanes de este tipo, pero ha dejado zarpar a alguno más crecidito a Alemania, déjando de ser el único lugar en el mundo donde se podían visitar los caimanes blancos en cautiverio. Es un plus más para ir a visitar en esta magnífica ciudad.
Pero los caimanes “copito” son tan solo uno de los múltipes atractivos que ofrece Nueva Orleans.
La histórica ciudad se ha ido rehaciendo poco a poco del golpe que supuso el Katrina y ha recuperado su espíritu.
El barrio francés, French Quarter, alrededor del cual creció la ciudad, conserva su encanto. Está protegido por el gobierno, que no permite que se tiren abajo sus edificios ya que son parte histórica de esta ciudad fundada en 1718.
Si buscas historia, diversión, música, fiesta, estás en el lugar apropiado. Si quieres degustar de un buen café, no dudes en visitar el famoso Café Du Monde, donde además podrás probar la especialidad de la casa, los deliciosos beignets.
Además, podrás recordar la época dorada de la ciudad embarcándote en los navíos de vapor, que parten desde la Plaza España, por el Missisipi; disfrutando de vistas de película, de escenarios de novelas y del mejor jazz sureño.
Si puedes, no dudes en irte de viaje a Nueva Orleans y descubrir la ciudad más diferente de la primera potencia del mundo. Un destino que no debes pasar por alto si cruzas el charco.