El Parque Nacional Villarica es antiguo, pero sigue siendo el centro de la actividad turística en el sur de Chile . En extensas hectáreas de 61.000 , se alarga desde la Provincia de Cautín, en las comunas de Pucón y Curarrehue, hasta terminar en los agradables espacios en la Provincia de Valdivia, en la X Región.
Ubicado en una división lateral de la Cordillera de Los Andes, el parque se caracteriza por sus volcanes, bosques, cuevas, ríos y lagunas.
Este verdadero oasis tiene sus grandes riquezas, entre ellas, el volcán Villarrica, que domina gran parte del paisaje y es el mayor imán para los turistas a pesar de tener la fama de ser el volcán más activo de Sudamérica. En su regazo cuenta con un buen equipado centro de esquí y cuevas de origen volcánicos que pueden ser recorridas. Por otro lado, se puede subir hasta el cráter del volcán para admirar no sólo el paisaje de lagos y lagunas que lo rodean, sino que también para observar la lava que sale desde su interior.
El Parque tiene una superficie de 63 mil hectáreas, con extensos bosques de araucarias y lenga, en los sectores altos, y raulí, mañío de hoja larga y coigüe, en los más bajos. Las zonas boscosas acogen la existencia de una nutrida fauna, como pumas, zorros chilla y culpeo, pudúes, coipos, peucos, quiques, chingues y monitos del monte, una de las tres especies de marsupiales que aún se conservan en Chile.
Una Suave Ruta
Para acceder a estas tranquilas y naturales áreas de esparcimiento y recreación de la Región de La Araucanía, se puede hacer mediante vía aérea o terrestre. Desde Santiago se emprende un viaje hasta llegar a Temuco. Desde allí es grato conocer un poco la ciudad para seguir con la ruta. Se toma, la Ruta 5 Sur y entrar al desvío a Villarrica en Freire. Desde Villarrica tomar el camino que va hacia Pucón, en el cual se ve todo un paisaje para fotografiar, con intensos lagos que borden el camino. Llegando al kilómetro 24, se encuentra el desvío hacia el parque. Son intensos 8 kilómetros por camino de ripio, que indican el lugar hacia la aventura.
Es apto para visitarlo durante todo el año. Gracias a su cuidada naturaleza se pueden practicar deportes como la pesca, el kayak de mar, kayak de río, rafting, esquí, montañismo, trekking, cabalgatas y observar apaciblemente la vida silvestre. Entre marzo y agosto, el panorama alaga con lluvias y blancas nevazones, mientras que en los meses más calurosos, las temperaturas son cálidas y abrazadoras.
Para, quienes gustan del camping, el Parque cuenta con áreas para ello donde los precios no superan los 15 mil pesos. Se encuentra el camping Quetrupillán y Puesco, con amplios senderos para salir a excursionar. Un paseo por los espacios verdes, para conocer nuestros bosques y llenarse de ánimo.